Si tuviéramos que hacer una lista de palabras que usamos con mucha frecuencia, ‘poco’ sería, paradójicamente, una de las primeras en la clasificación. Sin embargo, es una de las que más dudas puede suscitar. Por ejemplo, ¿es correcto decir que tengo poco hambre… o que tengo poca hambre? Y si a pesar de todo, estoy dispuesto a tomarme un buen café… ¿lo pido con un poco de leche o con una poca de leche?
En Hablar y Escribir Bien os solucionamos esta duda gramatical, y os regalamos un consejo más: estad muy atentos a todo lo que tenéis que tener en cuenta para simplemente empezar una frase con ‘por poco’.
[audio»http://www.ivoox.com/como-se-dice-poco-hambre-o-poca-hambre_md_2342207_1.mp3″] ¿Quieres escucharlo siempre que quieras? Aquí lo tienes.
Esta norma surgió a partir del análisis de La noche del oráculo, de Paul Auster, un programa de La Milana Bonita cuya escucha vale casi tanto la pena como la lectura del libro.
¡La Revolución ha comenzado!
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