A veces, en La Milana Bonita, dejamos que la improvisación tome el micrófono. No es una falta de preparación, ni mucho menos, sino una especie de respeto a la conversación pura, sin prejuicios. Por esta razón, en la mayoría de los programas quedan más de diez preguntas sin contestar en la Piedra Rosetta o, sin quererlo, terminamos grabando programas de dos horas.
Os contamos esto, porque hoy deberíamos estar publicando un programa sobre la fantástica novela Las edades de Lulú, de Almudena Grandes. Una narración pionera de una de las voces más representativas de la narrativa contemporánea que, seguro, tendrá el espacio que se merece en un futuro programa. Sin embargo, como habrás podido leer, el libro que hoy analizamos es Hamnet, de Maggie O’Farrell.
La razón es sencilla. No se trata de que una u otra sean mejores (hacer este tipo de disquisiciones es, directamente, estúpido si hablamos del arte). Este programa, simplemente, nace de una conversación entre amigos (con Dunia Etura) sobre literatura que nos llevó a demostrar nuestra fascinación compartida por esta obra que recupera, desde un punto de vista completamente diferente, la figura de Shakespeare.
Al final, resultó que en la conversación previa al programa estábamos tan cómodos charlando sobre Hamnet que, con un giro de guion que nos ha obligado a trabajar el doble, decidimos cambiar la lectura seleccionada. Esperamos que no os moleste, pero es que esto es La Milana Bonita.
¡La revolución ha comenzado!
Si fue una bonita casualidad que una charla amigable hiciera cambiar el calendario de La Milana a principios de noviembre, ha sido una triste coincidencia que precisamente a finales del mismo mes falleciera la autora de la novela sustituida. Descanse en paz, Almudena Grandes. He disfrutado mucho la lectura de «Hamnet», me ha encantado.