I. El pájaro que salió de los libros
Hace cuatro años, de entre los libros salió un pájaro. Nosotros lo llamamos La Milana Bonita y desde entonces, cada semana, la soltamos para ver con qué nos sorprende al volver a la redacción. Un día trajo astillas carbonizadas de una hoguera, otro vino con una gran cucaracha viva. No nos olvidamos tampoco del trozo de chocolate, ni del espejo…
II. El burro de algodón
Sin embargo, nunca antes había aparecido con algo tan grande. Cuando entró por la ventana con un burro todos nos miramos incrédulos. ¡Y ahora qué hacemos con él! ¡Pero qué le damos de comer! La milana nos dijo que el hermoso animal se llamaba Platero, que era su amigo y que estaba solo. Puede que sea por su pelo suave y esponjoso como el algodón o por su mirada fría y profunda, el caso es que nos lo hemos quedado hasta que encontremos a alguien que quiera cuidarlo.
III. El poeta que desnudó a la poesía
Preguntamos a nuestro pajarillo de dónde lo había sacado. Nos respondió que su dueño era el escritor que había desnudado a la poesía, pero que ya estaba muerto. Un señor muy importante y famoso, que huyó de las desgracias para encontrar la vida a través de las letras. Juan Ramón Jiménez se llamaba el amo del burro y ahora a nosotros nos tocaba cuidar de su creación.
IV. Los locos de la radio
Con el pájaro, el burro, y toda la redacción llena de libros, la gente nos ha empezado a llamar los locos de la radio, aunque tampoco nos importa. Disfrutamos con Platero y sus historias. Cortas, sutiles, vitalistas y, a veces, tan realistas que son crueles. Su vida es como un libro, a medio camino entre la lírica y la narrativa.
V. El fin del cinco
Tan fascinados estamos con Platero, que hemos decidido celebrar una fiesta en su honor. Él todavía no lo sabe, pero el final de la quinta temporada de La Milana Bonita lo vamos a dedicar al análisis de su vida. Queremos cerrar el año de lecturas, de alegrías y sinsabores con una gran sonrisa. Por supuesto, estáis todos vosotros invitados. Eso sí, rogaríamos que confirmarais la asistencia para tener tarta y platos suficientes para todos.
¡La revolución ha comenzado!